La catedral La Inmaculada
La idea de contar con un templo que tuviese todas las condiciones y características de una catedral, estuvo presente en los ánimos de los jefes de la iglesia y de sus sacerdotes. No obstante, no afloraba todavía el concepto definitivo y se pensaba tan solo en arreglar un templo para que sirviese de catedral.
El obispo Toral y el cabildo eclesiástico resuelven restaurar la ruinosa iglesia de la Compañía con tal objeto. Se nombra un director y recae dicho cargo en la persona de don Rafael Borja. Los dineros se obtendrían del diez por ciento de las rentas del obispo y de los canónigos. Surge ya la personalidad del Hermano Juan Stiehle como el arquitecto de dicha restauración, con el pago de total de 200 de pesos. Esto sucedió en el año de 1866.
de 1868 el señor Arcediano de entonces es, Miguel León, presenta un detallado informe sobre la imposibilidad de servirse de la Compañía para Catedral, y ordena de inmediato la demolición de la cúpula y torres que están cuarteadas por los repetidos sismos que azotaron a casi todos los sitios del país.
Derruida la parte principal de la Compañía y considerada la situación de no contar todavía con lugar que respondiese a los imperativos de una catedral, surge la idea magna de construir una gran catedral de acuerdo con la fe del pueblo y el afán del clero.
La catedral vista desde la calle sucre (frontal)
El 6 de Diciembre de 1872 se miden “cuarenta varas” entre las calles Sucre y Bolívar, frente a la plaza de Armas, para levantar la nueva catedral cuencana. En Noviembre, 3 de 1874 el obispo Toral alcanza un rescripto del Papa Pío IX, con la asignación de 500 pesos anuales para la fábrica de la catedral. La congregación de padres Redentoristas, que tenia deudas de gratitud con el obispo Toral por que contribuía con rentas, ofrece colaboración del arquitecto para proyectar tan formidable obra.
Pero pasa casi dos años y en los comienzos de 1879, el obispo Estévez de Toral pide informes al capitulo catedralicio: este aplaude la iniciativa y observa, con la siguiente palabras “…y hacemos presente a V.S. Ilma. Que los fondos de esa catedral son por ahora los necesarios para el mantenimiento del culto, de aquí que no hay los medios para construir un palacio episcopal y de una NUEVA CATEDRAL” El 09 de Enero de 1880, resuelve el obispo Toral, con la venia del cabildo, destinar los terrenos de la iglesia la Compañía para ahí levantar la Nueva Catedral, dejando la vieja como la parroquia del sagrario, se encarga a varios canónigos llamados canónigos obreros la recolección de fondos para la fabrica.
Las cùpulas
La construcción debía comenzar el siete de marzo de 1882, se nombra promotores a los canónigos Manuel de la Cruz Hurtado y León Piedra, enferma gravemente el obispo Toral, tan grave que lo lleva al sepulcro en mayo de 1883, sin haber tenido la dicha de colocar la primera piedra de la nueva catedral.
La dignidad episcopal recae en la personalidad de Miguel de León, quien colaboro muy de cerca con los sueños de Estévez de Toral, a este le correspondió comenzar el levantamiento de un monumento impresionante en las tierras del Tomebamba. _______________________________________
LOS PLANOS Y EL DESTINO.
Planos de la catedral
El hermano Juan, Redentorista, el lego, dirige la excavación de los cimientos profundos. El de la tierra brota abundantemente y en ese tiempo frente a la ausencia de bombas y de toda herramienta apropiada, constituye el agua el peor y más invisible enemigo de la construcción.
Se hacen los canales de desagüe, se abren anchísimas cunetas cuya prolongación va desde la calle Aguirre hacia la Cordero para seguir indefinidamente por el Sur de la ciudad. La mente popular, poblada de imágenes y quimeras, afirmaba que se han construido comunicaciones secretas entre la vieja y la Nueva catedral, o que se han hecho caminos subterráneos quien sabe con que fines malévolos y obscuros…
Las cúpulas desde la plaza de las Flores
No habrá que olvidar, que en los primeros planos presentados por el arquitecto Juan Stiehle , fueron rechazados por el obispo León, pues decía que los anhelos de Cuenca y el suyo era el contar con una gran catedral y no solo un templo. Vale anotar que los primeros plano que presento el hermano Juan sirvieron par levantar el santuario que consagro Colombia al señor de los Milagros, en la ciudad de Buga. “Deseo-decía Monseñor León- una catedral tan grande como mi fe”
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LAS PRIMERAS RENTAS Y ASIGNACIONES.
Monseñor león medita la obra que ha iniciado y comprende que quizá esta mas allá de sus fuerzas y las escasas de los habitantes de Cuenca. No obstante apreciar que las catedrales son obras de siglos , como casi todas en Europa , piensa Monseñor León que todo es poco par atender el acervo de gastos. Pero no se amedrenta por eso y busca por todos lados la contribución que ha de ir sumándose, como un grano sobre otro, hasta formar una, montaña de dinero que ha de convertirse en una montaña de arte y de oración.
El mismo señala la apreciable suma de 3000 sucres de los fondos parroquiales para materiales urgente Europa.
Papa Juan Plablo II
¿Quién será la persona que habrá de comprar dichos materiales en Europa?
Habría un hombre que pudiera tener esa confianza, uno que viajaba con frecuencia a Europa y conocía los detalles de la negociación en ese continente era don Carlos Ordoñez, un varón enérgico e integro , hecho para las grandes empresas y acciones.
El Arquitecto el hermano Juan escribe la lista de los materiales y herramientas que debía traer el señor Ordoñez. Con fecha de Agosto 19 de 1887 la lista dice así:
“Una cadena de Fierro galvanizado de veinte metros de largo: seria preferible de acero; dos poleas móviles , de hierro, triple garganta; media docena de carretillas para grandes pesos; dos maquinas tornos, para levantar y arrastrar grandes pesos (serán semejantes a las que hay en Nudpud); doscientos metros de rieles de acero y dos vagones con doble repuesto de chumaceras; tres quintales de tornillos de hierro, con tuercas y en surtido; con el largo desde 25 hasta 40 centímetros; dos quintales de tornillos para madera con longitud de 7 hasta 15 centímetros, en surtido; cuatro combas de buen acero, con el peso de diez libras cada una, para romper piedras a golpe…”
Se puede deducir como se encontraba el comercio en nuestro país para mandar a pedir esto en Europa.
Los dineros de iniciación se han gastado en cimientos y pedidos al Exterior; pero, hace falta más dinero. Monseñor León, por auto episcopal, las rentas vacantes del Cabildo eclesiástico (con la consiguiente protesta de este) a la fabrica de la Catedral. Pero, nada le detiene y las rentas quedan asignadas.
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LA HISTORICA ACTA DE LOS PADRES REDENTORISTAS.
Placas en los muros de la Catedral Inmaculada
Esta acta es de de vital interés pues recoge el convenio por el cual los padres redentoristas se comprometen con el clero y cuenca para construir la nueva catedral como el conservar la fabrica de la misma , y de prestar su al hermano Juan Sthiele como el arquitecto y director de la obra y a su vez el pago de 500 pesos anuales has que concluya la obra, pero si se suspendía las misma se dejaba de pagar..
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DIFICULTADES Y NUEVOS BRIOS.
El herma Juan, trabaja incesantemente. Presenta tres nuevos planos. Monseñor ausente en Quito puede aprobar definitivamente en Diciienbre a los tres meses de presentados.
Una noticia dolorosa amilana los ánimos, pero no los derrota. En Naranjal se hunde una embarcación con algunos bultos que contenían algunas piezas de los dos carros fabricados en Guayaquil par servir a la fabrica. El cabildo eclesiástico culpa de la perdida al capitán, quien pago obligado por las autoridades gobernativas.
Infrestructura de la Gran Caterdal
El trabajo continua acelerado el hermano Juan pide más jornaleros. Escasea el dinero y el Obispo león acuerda un sistema de mingas de todas las parroquias: los niños incluso, que en determinados días llevan piedrecillas desde los ríos de Cuenca para echar en los cimientos. Se necesita más y más cal. El cabildo eclesiástico compra una caleras al señor Antonio Aguilar. El obispo siguen sin llenar las rentas de los canónigos y sus rentas las asigna a la fábrica, también los dineros del Decanato y Arcedianato. Protestas y descontentos pero la catedral brota del suelo y comienza a llevarse. Se alegra el vecindario doña María Arriaga dona a la catedral toda la piedra de sus canteras de Putuzhi.
Don Belisario Reyes se opone por el daño que causaba a sus intereses, pero el intendente Mariano Estrella, se pone de lado de la iglesia y obliga a continuar con la extracción de piedra.
El doctor Rómulo Bernal renuncia a su cargo de sobrestante , el 14 de Junio de 1889 y le reemplaza el hermano Juan , a quien le asignan un subsidio de diez pesos mensuales, pero falta mas dinero.
Los trabajadores se quejan de sus salarios; emigran a Guayaquil en busca de ganancias mayores. El obispos aumenta los jornales y continua la fábrica. Se declara la beligerancia entre el obispo y los sacerdotes; crece el malestar y viene la suspensión del obispo León, nombrándose un Administrador apostólico….!
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ALGUNOS DATOS INTERESANTES...
Promotores de la fábrica: Canónigos León Piedra, Manuel Álvarez, Daniel Hermida, Isaac M. Peña, Nicanor Carpio, Manuel M. Palacios Bravo.
Albañiles de nota: pascual Lojano y Luis Antonio Chicaiza “el ingeniero” a quien la construcción de la catedral le costo la perdida de dos hijos, cuando se hacia las cúpulas. Maqueta: fue hecha bajo la dirección de el arquitecto Juan Stiehle, por el escultor Ángel Figueroa, presidente de la sociedad obrera de la Salle, presentada por primera vez al públicos en 1904.
Hermosa cúpula
Las torres alcanzan 72 metros de altura. La cúpula mayor tiene 52 metros. La cripta se extiende bajo la parte central de la catedral y puede albergar alrededor de 3000 personas, con holgura 9000 personas
La cùpula mayor
Están sepultado en la cripta: Ana Ortega de Hermida, la primera en ser colocada , madre del obispo que cerro la iglesia subterránea, remigio Crespo toral, Nicanor Aguilar, Juan María Cuesta , Florencia Astudillo, Joaquín Martínez Tamariz , Isaac de M. Peña., Juna José Cordero, Manuel Ordoñez A., Miguel Agustín Heredia, remigio Crespo vega , Manuel Peña Jaramillo, Julio Llerena Garzón.
La cripta
El primero en ocupar los nichos pontificales fue Monseñor Daniel Hermida Ortega el 30 de Septiembre de 1956.
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HOY EN DIA.,
La Catedral "La Inmaculada" fue uno de los motivos por los que Cuenca fue declarada Patrimonio Nacional de la Humanidad y ha sido decretada en estado de emergencia, dando pasó a unos pequeños retoques para que su hermosura no se pierda.
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